Arte que evoca un baile pleno de sensaciones y color

Daniel Pérez Mora, es un artista plástico que, a fuerza de tesón y claridad de objetivos en cuanto a lo que quiere expresar y dejar como legado, se ha propuesto incursionar y evolucionar rápidamente en el mundo del arte con una apuesta que conjuga Cinetismo y Pop Art.

Por Humberto Luque Mendoza

Pérez Mora intenta a través de su obra, y como bien lo señala, innovar. “Los estudios que vengo realizando, son para crear innovaciones en el arte a partir del tipo de materiales que utilizo, con una tecnología de impresión de colores UV que son anti agua, que hace posible exhibirlas, no solo en el interior de los hogares, sino también en los exteriores”.

Artista Plástico, Daniel Pérez Mora.

Destaca que, con esta técnica, sus obras serán perdurables a través del tiempo lo cual garantiza a los compradores, un mayor disfrute de su inversión.

En su proceso creativo, el denominado “Cinético” resalta que lo que siempre quiso inventar fueron obras que tuvieran movimientos para de esta forma impactar al público y, a su vez, que “pudieran interactuar con ellas tocándolas, y obtener de esta forma, diferentes sensaciones de movilidad”.

En ese sentido, considera “puedo captar la atención de cualquier público, inclusive sin importar su edad, por ser piezas muy llamativas que ofrecen diversidad de colores, figuras… La idea es poder llamar la atención de más personas para incentivarlas a conocer y apreciar aún más el arte plástico”, acota.

Su propuesta, tal como describe, es una mezcla de Arte Cinético y Op-art, centradas en producir algún tipo de movimiento. “Sin embargo, en algunas de mis obras existe la combinación de las dos anteriores y, adicionalmente, presento arte sacro, el cual lo expresé en una de las obras que realicé para la exposición en Miami Florida en conmemoración a la Virgen de Coromoto”.

También ha realizado extracciones de personas (fotografías); algunas de ellas realizadas para las diferentes exposiciones de la beatificación del Doctor José Gregorio Hernández, en donde, tal como señala, “rompo un poco la esencia de esas dos corrientes, dándole a mis piezas una nueva idea y forma de abordarlas”.

Diversas maneras de apreciar

Daniel Pérez Mora, refiere que su propuesta tiene tres maneras de disfrutarlas. “La primera es cuando el espectador gira levemente su cabeza; la segunda, cuando la pieza es movida por el viento; y, la tercera, cuando el espectador la toca y juega con ella, en todas estas diferentes formas se puede percibir distintas vibraciones. A este particular estilo el artista lo denomina: Vibrant Lines, propuesta con la que Pérez Mora se dio a conocer.

Hoy día el artista ha diversificado su planteamiento, y presenta otros tres estilos, que denomina: Distorted Cubes, Hybrids y Space.

Otro elemento característico de “El Cinético” es que en sus obras pone de manifiesto dos de sus pasiones, el arte y la música. “Con sus movimientos, cada obra pareciera estar bailando y logro transmitir mis sentimientos, emociones y alegrías. A través de líneas, curvas, colores y figuras, intento que el espectador disfrute esa misma sensación”.

Influencias importantes

Como todo amante del arte, las influencias de grandes modelos y maestros están a la orden del día. En el caso de “El Cinético”, esa premisa se mantiene.

Al respecto, destaca que existen varios artistas que son influencia en sus creaciones, tales como los maestros Víctor Vasarely, Jesús Soto, Carlos Cruz-Diez, Alejandro Otero, Mateo Manaure, Oswaldo Subero. “Aunque no todos fueron o abordaron el cinetismo, la forma en que trabajaron los colores influyó en forma determinante mi persona”.

Ahora bien, cuando se le consulta sobre qué tan importante es la musa o el elemento intuitivo para el desarrollo de su trabajo, Daniel Pérez Mora es enfático al resaltar que “la inspiración es la parte más importante para el desarrollo de las obras. Cuando imagino lo que me gustaría hacer y cómo lo podría plasmar en mis piezas, todo el proceso inspirador que me lleva a conseguir lo que imagino y la forma de poder mostrárselo al público, es determinante en el resultado final”.

Con respecto a su proyecto artístico, considera que ha tenido una excelente y agradable aceptación por parte del público, aunque éste no conozca de arte, y eso me llena de satisfacción. De igual forma, agradece y lo conforta el hecho de la buena receptividad por parte del gremio artístico, así como por parte de los críticos, curadores y promotores culturales, quienes han manifestado que “mi trabajo es limpio, alegre y moderno”; razón que lo motiva a seguir creciendo y trabajando arduamente en función de su carrera.

Recorrido vital

La evolución del trabajo de un artista se observa a medida que los pasos se hacen obra. En el caso de “El Cinético”, su evolución, tal como él mismo describe, “ha sido muy rápida”.

En tan poco tiempo, refiere, ha logrado definir cuatro estilos, lo cual es producto de la disciplina y el estudio, y que ha logrado ver reflejado en lugares diversos. En tal sentido, una de sus piezas se encuentra en los espacios abiertos del Museo Alejandro Otero de Caracas.

“Tengo aproximadamente cinco años trabajando mis obras para mostrárselas al mundo, pero decidí hace tres años tomármelo como un reto y, a partir de allí, he logrado exposiciones importantes a nivel nacional e internacional, en diferentes museos, universidades, fundaciones, asociaciones y hoteles de renombre”, explicó.

En ese orden, en una de ellas, representó a Venezuela en Latinoamérica, su obra fue seleccionada como ganadora en el Museo Socorro de Brasil en la exposición MIRADA LATINOAMERICANA ACTUAL, en donde participaron 8 países, 160 artistas y solo 14 ganaron, entre ellos Pérez Mora, para la colección permanente del mismo.

Con satisfacción señala que cada día es una nueva experiencia que lo posiciona y lo integra aún más al gremio del arte. “Hoy en día formo parte de cuatro asociaciones que me avalan como artista plástico, la (UNESCO) que es la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura; de la (AIAP) que es International Association of Art; la (AVAP) Asociación Venezolana de Artistas Plásticos; y del Sindicato Profesional de Trabajadores de Radio, Teatro, Cine, TV, y Afines del Distrito Capital y Estado Miranda”. Además, ha sido ganador de 5 premios, con diferentes nominaciones en fundaciones de Venezuela y 1 internacional en Miami Florida como Artista Plástico del año.

Arte como inversión

Con relación a la interrogante de si es posible para un artista, más en estos tiempos de convulsión económica, vivir del arte, Daniel Pérez Mora resalta sin duda que, por no ser la realidad económica mundial la más apropiada para el rubro, considera que el artista plástico en general, debería innovar en sus propuestas para que sean atractivas a los inversionistas y, de esa manera, poder mejorar sus ventas.

“Claramente el arte sí es una buena inversión, que se expresa no sólo en la satisfacción y el placer que brinda a quien la posee, sino en términos de revalorización, pues constituye un activo”, apunta.

En cuanto a las recomendaciones que haría a los noveles artistas, los invita a buscar apoyo de las asociaciones, instituciones y fundaciones de arte y cultura, de manera que a través de ellas puedan mostrar sus propuestas y de esa manera darse a conocer.